Una reserva en contabilidad es una cuenta en la que se registran ciertos montos que se han set aside (separado) para cubrir obligaciones futuras o para absorber pérdidas esperadas. Las reservas se utilizan a menudo para mantener la estabilidad y la solvencia de una empresa, y suelen estar relacionadas con cosas como impuestos, indemnizaciones, depreciación y pérdidas de activos.
La reserva legal es un porcentaje de las ganancias netas de una empresa que deben ser retenidas y no pueden ser repartidas entre los accionistas. La reserva estatutaria, por otro lado, es un fondo que se establece en el estatuto de una empresa y se utiliza para enfrentar posibles pérdidas o financiar inversiones. La reserva ocasional, por último, es un fondo que se crea de forma ocasional y se utiliza para fines específicos, como financiar una adquisición o una ampliación del negocio.