Una
provisión es una partida contable que se establece para cubrir un gasto futuro
incierto o contingente. Una provisión se establece para reflejar la expectativa
de una empresa de que ocurrirá un evento que requerirá un pago o un gasto en el
futuro. Por lo tanto, una provisión se considera un pasivo, ya que representa
una obligación financiera futura de la empresa.
Hay varios tipos de provisiones, incluyendo provisiones para litigios, indemnizaciones, pensiones y otros gastos similares. Las provisiones son importantes porque permiten a una empresa reconocer y gestionar los riesgos financieros futuros, y también pueden ser un indicador importante de la solvencia y la estabilidad de una empresa para los inversores y otros interesados.
Para establecer una provisión, una empresa debe evaluar cuidadosamente la probabilidad de que ocurra el evento en cuestión y estimar un monto razonable para cubrir el gasto futuro asociado. La provisión se registra en la contabilidad y se ajusta periódicamente para reflejar cualquier cambio en las expectativas de la empresa.